Nos
empeñamos en cosas sin sentido. A depender de alguien, en creer que lo
grande y bonito es mejor, que lo pequeño y feo es peor. En pensar que un
ferrari, calmara nuestra impotencia, y nos hará más felices. ¿Sabes? Lo
mejor no es eso. Lo mejor es levantarse, y tener a alguien al lado que
te diga "Buenos días mi niña, ¿Qué tal has dormido hoy?" Lo mejor es ir
por la calle, y cruzartelo... y que te mire, y te sonría, y se te ponga
esa cara de tonta, pero una tonta feliz. Lo mejor es recibir un mensaje
que te alegre el día. Lo mejor es que te llame tu mejor amiga para salir
hoy por la noche, y comeros la ciudad cachito a cachito. Lo mejor es
tener a alguien que merezca la pena. Las verdades a la cara aunque
duelan, y mandar a tomar por culo las mentiras, con mentiroso incluido.
Lo mejor es dejarse llevar. El mundo, la vida, y acciones que hagamos en
un momento determinado, pondrán a cada persona en su lugar, a cada nube
en su cielo, a cada "rey" en su trono, a cada perdedor en su banquillo,
a cada payaso en su circo, y... a cada puta en su esquina.
Un día te das cuenta de que aquello que llaman libertad no consiste en
romper cadenas, sino en estar preso en alguien que te provoca
escalofríos.
Que todo aquello que llaman amor no es ni una cuarta parte de lo que
siento dentro cuando le veo sonreír, caminar, hablar, o solamente estar.
Que todas esas películas, historias, leyendas y cuentos, hablando de
princesas y caballeros, de amores negados e imposibles, no tienen ni la
mitad de magia que tienen las tardes bajo sus ojos.
Que todos los poetas que creen hacer poesía dejarian de creer hacerla si
le oyeran hablar, que todos los versos de Neruda parecen poco al lado
de lo que sale de su boca.
Que todas las canciones parece que fueron escritas para él.
Y moriría sin las miradas, las sonrisas, las tardes, los roces de piel, el sudor mezclándose y la respiración acompasada.
Aquello que llaman vida no lo es si no es a su lado. Y aquello que llaman muerte no existe si es con él.